miércoles, 21 de diciembre de 2011

Tártar a los dos Salmones con Crema de Aguacate

Llegan las Navidades, una época de comidas familiares, de empresa
de excesos en general. Por todo eso, a la hora de preparar nuestros platos navideños debemos tener en cuenta, no solo el impresionar a nuestros invitados, sino también cuidar un poco nuestro estómago quizás un poco saturado en estas fechas.

Por este motivo, a la hora de elaborar el menú de Nochebuena lo he tenido en cuenta y uno de los platos que voy a incluir, es este tártar a base de dos salmones. Una receta, que sin dejar atrás el sabor y originalidad resulta muy saludable a la vez que rápida de preparar.



INGREDIENTES: (Para 2 personas)

- 1 Paquete de salmón ahumado Martiko (es excepcional su sabor)
- 150 gramos de salmón fresco
- Alcaparras
- Pepinillos agridulces
- Olivas negras deshuesadas
- Un tomate (que este bien tirante)
- Cebollita tierna
- Mostaza Antigua
- Limón
- Soja
- Aguacate
- Plátano macho
- Cebollino
- Sal Maldon
- Eneldo
- Cilantro


ELABORACION:

Comenzamos retirando la piel y las espinas del salmón, (yo lo congelo previamente por el tema del anisakis) picándolo finamente a cuchillo. Lo introducimos en un bol, salpimentamos y lo regamos con zumo de limón, aceite, soja y una cucharada de mostaza a la antigua. Lo cubrimos con papel film y lo dejamos marinar de 2 a 3 horas en la nevera.

Mientras iremos preparando la crema de aguacate. En el vaso de la batidora iremos incorporando el aguacate, medio tomate, un poco de cebollita tierna, zumo de limón (cuidado no pasarse), aceite, sal, pimienta y un poco de cilantro. Lo trituramos todo bien hasta conseguir una textura cremosa, rectificando de algún ingrediente si es necesario. Lo taparemos con papel film y reservaremos en la nevera.

A continuación trocearemos unas olivas negras, unas alcaparras, pepinillos, tomate y un poco de cebollita. Espolvorearemos con eneldo y lo incorporamos al salmón que teníamos en la nevera marinando. Con un aro redondo (untado con mantequilla, para facilitar el desmoldado), colocaremos las lonchas de salmón ahumado en cruz para formar un paquete, dejando suficiente sobrante para cubrir la parte superior. Rellenamos el aro con la mezcla del salmón y cerramos.
Acompañamos con unos chips de plátano macho, que habremos frito previamente en láminas bien finas. decoramos y acompañamos con un poco de la crema de aguacate, rematando con un pepinillo, cebollino picado, y un toque de sal Maldon a modo de decoración.


Espero que os guste la receta que he preparado, yo la voy a incorporar en mi menú de esta Nochebuena, pues resulta un entrante muy fresco y elegante. Os deseo a todos FELICES FIESTAS....nos vemos prontito!


viernes, 16 de diciembre de 2011

Solomillo de Cerdo con Salsa de Nueces y Cebollitas Glaseadas



Nos vamos acercando a las fiestas Navideñas y es época de ofrecer a nuestros familiares y amigos unas propuestas culinarias distintas y originales, teniendo en cuenta que en la mayoría de los hogares debemos ajustar un poco el presupuesto con respecto a otros años, esta semana he decidido preparar una receta de lo más sencilla y que apuesto sera del agrado de vuestros comensales.

El solomillo de cerdo es una carne muy versátil y que admite infinidad de combinaciones y a la que le sientan bien practicamente todo tipo de salsas y guarniciones. Si añadimos a todo ello, que su precio en el mercado es más que asequible, se convierte en un plato estrella a la hora de preparar ricos platos.



INGREDIENTES: (Para 2 Personas)

- 1 Solomillo de cerdo (si es ibérico mucho mejor)
- 1 cebollita tierna
- 50 gramos de nueces peladas (Común y de Macadamia).
- 100 ml de leche evaporada Ideal de Nestle
- 1 copita de brandy
- 1 bote de cebollitas en vinagre
- Aceite de oliva virgen
- Pimenta
- Soja
- 2 cucharadas soperas de azúcar
- 200 ml de vino tinto
- 2 Patatas

ELABORACION:

Comenzaremos la receta limpiando las cebolletas y picándolas (no importa el tamaño, pues luego la pasaremos por la batidora). En una sartén con un poco de aceite de oliva sofreiremos la cebolla hasta que empiece a transparentar, añadiremos la nueces peladas y saltearemos un par de minutos. A continuación rociaremos con la copita de brandy y flambearemos (siempre apagando el extractor de la campana) hasta que se consuma el alcohol. Retiraremos del fuego y pasaremos a un vaso para triturar con una batidora hasta que la mezcla quede bien fina. Se añade la leche evaporada y corregiremos de sal y pimienta. Reservamos.



Para preparar la guarnición empezaremos con las cebollitas glaseadas. Escurriremos bien las cebollas en vinagre y en un cazo o sartén pequeña pondremos el azúcar junto al vino tinto y mantendremos a fuego vivo, cuando hierva añadiremos las cebollitas y una cucharada sopera de soja. Lo mantendremos a fuego medio hasta que el vino adquiera consistencia de jarabe. En cuanto a las patatas, no hay más que decir las cortamos al gusto y las freímos. Mi madre me enseño un truco que aprendió cuando estuvo trabajando en una cocina en Francia, y según ella, si se fríen primero a fuego más lento y se reservan, cuando ya tenemos listos el resto de ingredientes, las volvemos a freír esta vez a fuego bien fuerte, pues así conseguimos que la patata esté crujiente por fuera y por dentro quede en su punto.



Por último, salpimentamos el solomillo y doraremos en una sartén con aceite bien caliente, girándolo para que queden bien doradito de forma uniforme. Taparemos la sartén para que se nos haga bien por dentro, a mí particularmente, el solomillo de cerdo me gusta bien hecho, (aunque sin pasarse, hay que recordar que no es como la ternera o el el buey, y que esta carne poco hecha es la que más parasitos vivos puede tener), finalmente cortaremos en rodajas y emplataremos con nuestra salsita y la guarnición.

Espero que os guste el plato, en casa os aseguro que nos encantó, eso sí comprar una buena barra de pan porque es un delito no mojar en esa salsa. Que os aproveche.

viernes, 9 de diciembre de 2011

Huevos Rellenos con Guacamole de Mango



Los huevos rellenos son una receta sumamente fácil de preparar y que a la mayoría de la gente les agrada a la hora de comerselos. Yo creo que es una de las formas más comunes de preparar este producto tan nutritivo, amén de los "huevos fritos" que son los reyes a la hora de servir este manjar. No hay nada como comer un huevo frito bien hecho, junto a unos ajitos y mojar pan hasta no poder más.

Como en casa siempre los he solido comer de la forma más tradicional, (rellenos de atún, mayonesa...) este fin de semana los preparé de una forma un tanto especial, haciendo una combinación un tanto arriesgada pero cuando los serví en las mesa, mis amigos se quedaron con la boca abierta, no solo por lo vistosos que quedaron, sino más bien por su sabor fresco y un tanto exótico que resultaron.

Ahora que se acerca estos días navideños, os recomiendo hacer este tipo de entrante que suele ser todo un clásico, pero que con estos pequeños cambios que me he permitido hacer, el resultado es un plato que se sale de lo convencional y que os hará quedar muy bien ante vuestros invitados. Espero que os guste el resultado.



INGREDIENTES: (Para 2 Personas)

- 3 Huevos
- Aguacate
- Tomate
- Cebollita tierna
- ½ Mango
- Limón
- Pimienta
- Aceite de oliva virgen extra
- 6 Langostinos cocidos


ELABORACION:

En primer lugar y lo imprescindible es cocer los huevos de la forma tradicional que solemos hacer desde siempre. La verdad es que la receta es tan fácil que se elabora en un santiamén, por lo cual si tenéis pensado preparar más platos, lo podéis realizar con antelación y montarlo todo a la hora de servir. Dejaremos enfriar y nos pondremos con el guacamole.

En el vaso de la batidora vamos incorporando poco a poco todos los ingredientes. En primer lugar el aguacate, que habremos partido por la mitad y vaciado toda su carne, retirando el hueso central, luego un tomate pequeño, un trocito de cebolleta (la cantidad variará según gustos) a mi particularmente no me gusta que sepa mucho a cebolla, el zumo de medio limón, pimienta, sal y aceite de oliva. Trituramos bien hasta conseguir una mezcla homogénea y comprobamos el punto de sabor, con el fin de añadir algún ingrediente más hasta conseguir ese sabor característico del guacamole.



Existen en el mercado unos sobres que ya llevan todas las especias para la preparación del guacamole, si se utiliza con moderación y combinandolo con ingredientes frescos, el resultado es muy bueno. Como veis bien fácil. Por otro lado pelaremos el mango y utilizaremos unas cuantas rodajas de éste, el cual cortaremos muy finito para incorporarlo a la mezcla. Lo cubrimos con papel film y guardamos en la nevera hasta la hora de emplatar. Pelamos los langostinos y llegada la hora de servir, rallamos sobre el plato la yema del huevo, colocamos la clara vacía partida por la mitad, encima, quitandole un poco a la base para que éste tenga más estabilidad. Lo rellenamos con la mezcla y lo coronamos con los langostinos. Si tenéis preparado algún aceite de albahaca o hierbabuena, os dará el toque final de decoración.

El plato queda finalizado y listo para servir, seguro que será un éxito. Espero que os guste

miércoles, 30 de noviembre de 2011

Pulpitos en Salsa de Anís



Esta semana he preparado una receta un tanto peculiar, no solo por la sencillez de su elaboración, sino más bien por el contraste de sus ingredientes. Es un plato que cuando lo hago en casa mi marido, se acaba comiendo toda la cantidad que haga y aunque piense que me excedido y voy a poder guardar para otro día, nada de nada, se termina. La verdad es que es resulta muy grato al paladar y que se puede acompañar de cualquier tipo de guarnición, yo en este caso he optado por un puré de patatas pero podemos servirlo con arroz, con cous-cous, con pasta ...

El único inconveniente que tiene es que algunas veces me resulta muy complicado encontrar estos pulpitos, pués tienen que ser pequeños para que resulten tiernos y agradables de comer. Si podéis encontrarlos y os atrevéis a hacerlos, os aseguro que os encantará esta versión y no dejará indiferentes a vuestros invitados.




INGREDIENTES: (Para 2 personas)

- 750 gramos de pulpitos
- 2 Cebollas tiernas
- 2 Cebollas Moradas
- Anís Estrellado
- Pimienta en Grano
- Anís Seco o Dulce
- Miel
- Puré de patatas

ELABORACION:


La sencillez de la preparación plato es tal, que os va a sorprender. Lo primero que tenemos que hacer es pelar y partir la cebolla en gajos más bien finos, lavar bien los pulpitos porque estos, no necesitan pelarse ni limpiar como ocurre con los calamares, que nos suelen dar mucha más faena en ese aspecto.



En una cazuela de base ancha, echamos una buen chorrito de aceite de oliva y cuando empiece a calentarse incorporamos la cebolla junto a unos cuantos granos de pimienta y 4 ó 5 piezas de anis estrellado, los sofreímos durante unos 10 minutos y a continuación añadimos los pulpitos bien lavados, los dejamos a fuego fuerte y pasados unos minutos los regamos con un vasito de anís seco (puede se dulce), idea que descubrí de mi madre, que solía hacer la sepia con este licor. Quizás os sorprenda un poco la utilización del anís, pero os aseguro que el sabor que resulta de dicha emulsión es sumamente gratificante.

Dejamos que se cocinen a fuego medio-fuerte durante 30 minutos aproximadamente, controlando la cebolla para que se vaya caramelizando. A mitad de cocción, le añado un buen chorrito de miel para endulzar un poco el sabor (me encanta el contraste de sabores). Por cierto, si utilizáis anís dulce no hace falta que le pongáis miel, pues nos quedaría demasiado empalagoso.



Preparamos el puré de patatas, yo en este caso, como siempre voy con falta de tiempo he decidido utilizar uno de sobre, pero si disponéis de tiempo sufiente, lo podeis hacer vosotros mismo y os quedará mucho más natural. Cuando el puré este en su punto, le añadiremos unas cuantas alcaparras y resevaremos. Dejaremos reposar el guiso en la cazuela ( yo lo suelo preparar de un día para otro ) y lo único que nos queda es emplatar. En este caso lo he hecho de dos maneras, por un lado con ayuda de un aro redondo, hacemos una cama con el puré y colocamos encima los pulpitos y por otra parte lo he emplatado de forma separada. A vuestro gusto.
Probadlo y ya me contareis!!!


jueves, 17 de noviembre de 2011

Crema de Calabaza con Vieiras y Trigueros



La calabaza es una hortaliza muy versátil a la hora de preparar recetas. Su origen es un poco difuso, algunas fuentes afirman que procede de América, aunque parece ser que no es del todo cierto y que fue por el Asia Meridional donde se originara, eso si con la peculiaridad de que solo se cultivaba para aprovechar sus pepitas, aunque esta costumbre fue desapareciendo a medida que surgieron variedades con más pulpa y con sabor. Los españoles fuimos quienes la introducimos en Europa allá por el siglo XV y se propagó por zonas de clima húmedo.

Se encuentra en el mercado disponible durante todo el año, pero es quizás en esta temporada otoño e invierno cuando su sabor es más dulce y de hecho se consume más. La verdad es que las cremas y purés son platos que apetecen mucho en esta temporada del año y esta semana he decido preparar esta crema con una mezcla de ingredientes que la hacen muy original y con un agradable sabor. Espero que os guste.

INGREDIENTES: (2 o 3 personas)

- 500 gramos de calabaza
- 1 Zanahoria mediana
- 1 Ajo puerro
- 1 Ajo
- 1 Patata mediana
- Caldo de pescado
- Carne de Vieira ( 4 o 6 Porciones)
- 6 Langostinos, Gambón o Gamba Rayada
- Esparragos
- Mantequilla, Aceite



ELABORACION:


En primer lugar pelaremos, lavaremos y trocearemos toda la verdura, excepto los espárragos que los dejaremos enteros. Comenzaremos con la calabaza, la zanahoria, luego la patata y el por último el puerro. Reservamos la verdura para tenerla a punto a la hora de comenzar a cocinar la crema.

Lavaremos las gambas (yo en este caso he cogido gambón, pues en la pescadería tenían muy buena pinta y estaban a muy buen precio), quitaremos los bigotes y separaremos la cabeza de la cola, a la cual le retiraremos la piel y reservaremos en la nevera.



En una cazuela, más bien ancha pondremos un poco de aceite de oliva y sofreiremos la cabeza de las gambas (salpimentamos), mientras se fríen, las aplastaremos para sacarles el jugo del interior. Una vez conseguido, retiramos las cabezas y desechamos. Cortamos un ajo en láminas y en el mismo aceite que hemos sofrito las cabezas añadimos un poco de mantequilla e incorporamos el ajo.
Lo doramos unos segundos y echamos toda la verdura que teníamos cortada, les damos unas vueltas para que se mezclen los sabores y dejamos sofreír unos minutos.

A continuación, cubrimos con el caldo de pescado y lo mantendremos a fuego medio-fuerte durante 30 minutos aproximadamente, o en su defecto que la verdura este en su punto. Trituraremos con la batidora y si queremos darle una consistencia más fina lo pasaremos por el chino y ya tendremos nuestra crema.



Prepararemos una sartén y pasaremos por la plancha los espárragos, las vieiras y el gambón Y simplemente emplataremos, a nuestro gusto. Es una versión un poco diferente en cuanto a las cremas únicamente de verdura pero os la recomiendo por su sabor especial. BUEN PROVECHO!!!

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Alubias con Almejas en Salsa verde



Nuca me cansaré de comentaros que las legumbres son una fuente fundamental de proteínas vegetales, yo me consideró una autentica abanderada de este tipo de alimento. Cuando eramos pequeños, a la mayoría de nosotros, se nos obligaba a su ingesta y nuestras madres padecían lo suyo para hacérnoslas "tragar". Sin embargo, a medida que nos hacemos mayores, vamos apreciando en su justo valor, la importancia de estos fabulosos guisos.

Sin querer dejar atrás este tipo de platos, que tanto nos recuerdan a nuestras madres y para hacerlos, quizás si cabe, un poco más ligeros, os propongo esta combinación de almejas con alubias, una mezcla de sabores muy interesante, mar, campo y tradición....espero que os guste.



INGREDIENTES:

- 300 gramos de alubia cocida
- Una lata de guisantes cocidos
- 500 gramos de almejas aprox.
- Un ajo
- Una cebolla pequeña
- Harina
- Perejil
- Caldo de pescado

ELABORACION:

Lo primero que tenemos que hacer es poner las almejas con agua y sal durante una hora aproximadamente para que suelten toda su arena. No hay nada más desagradable que encontrarte restos de arena en la comida, yo lo detesto, pienso que un plato pierde todo su encanto (creo que esto ya lo he comentado en alguna ocasión). Una vez pasado ese tiempo, las enjuagamos bien y en una cacerola junto a un poco de aceite de oliva echamos las almejas, tapándolas, hasta conseguir que se nos vayan abriendo, retiramos del fuego y reservamos. Una vez se hayan enfriado, retiramos algunas cáscaras del molusco con el fin de que una vez servido el plato nos sea más sencillo de comer.

En la misma cazuela que hemos abierto las almejas, pochamos bien, primero el ajo y luego la cebolla junto con un puñadito de perejil. Añadimos una cucharada sopera de harina y la sofreímos con cuidado de no que no se nos queme e inmediatamente lo regamos con un vaso de vino blanco, dejando que se evapore el alcohol. Echamos el caldo de pescado en la cazuela (un buen caldo casero no es difícil de hacer y el resultado siempre es superior) y lo dejamos hervir unos 15 minutos par conseguir que se mezclen bien todos los ingredientes. Una vez veamos que va cogiendo consistencia el caldo, incorporamos las alubias cocidas y las tenemos aproximadamente 20 minutos más.



Pasado este tiempo solo nos queda añadir los guisantes (previamente enjuagados) y las almejas que teníamos reservadas, espolvoreamos con una buena cantidad de perejil picado y con ello el guiso queda listo par servir. Yo os recomiendo hacerlo con antelación o inclusive un día antes, pues este tipo de plato necesita reposar bien para que se mezclen bien los sabores. Buen provecho!!


viernes, 4 de noviembre de 2011

Pollo al Brandy con Miel y Verduras



Esta semana os propongo una receta más bien sencilla, y que cuenta con cientos de versiones a la hora de elaborarse, se trata del pollo en salsa, un plato muy clásico cuya combinación de ingredientes hacen que cada plato tenga un sabor original. Dándole un toque diferente he mezclado verduras, miel y brandy.

El resultado es un sabor muy interesante y como en mi cocina suelo utilizar muchas especias, conjugandolas en su justa medida se consigue que, un plato de toda la vida, se convierta en algo más innovador y delicioso al paladar. Una sorpresa para aquellos que lo prueban por primera vez y gustan de este tipo de guisos...



INGREDIENTES: (para 2 personas)


- 4 Muslos de Pollo (si son de granja mejor)
- 1 Cebolla
- 1 Ajo
- 1 Zanahoria
- 1 Tomate maduro
- 5 o 6 Almendras- Brócoli
- Judia bobby (6 o 7 vainas)
- 1 Cucharada de harina o Maizena
- Miel
- Una naranja
- Puerro
- Mermelada de tomate
- medio vaso de brandy
- Salsa de Soja
- Comino en polvo, orégano
- Una ramita de romero
- Caldo de ave o verduras
- Una batata roja


PREPARACION:

Lo primero que tenemos que hacer es macerar los muslos de pollo. Cogeremos un ajo y dandole un golpe lo restregaremos por la carne del ave y luego lo laminaremos. Salpimentaremos y espolvoreamos con el comino en polvo y con el orégano, añadiendole un chorrito de soja (hay que tener cuidado de no pasarse con la sal) y un poco de aceite de oliva. A continuación incorporaremos unas cáscaras de naranja, un poco del zumo de ésta y una hoja de laurel. Lo tapamos con papel film y lo dejamos reposar mínimo 3 o 4 horas en la nevera.




Mientras tanto, vamos preparando las verduras. Limpiamos y troceamos la zanahoria, el puerro, las judias y el brócoli. Picamos la cebolla finamente y rallamos el tomate . En una cazuela de base ancha echamos un buen chorro de aceite de oliva y doramos las almendras, las retiramos y las pasamos a un mortero para picarlas.

En ese mismo aceite, doramos los muslo de pollo que teniamos macerando pero con la precaución de quitarle las láminas de ajo, con el fin de que éste no se nos queme ya que nos dejaría un sabor amargo al guiso. Una vez el pollo va tomado color lo retiramos y reservamos. En la misma cazuela incorporamos primero el ajo que teniamos laminado y inmediatamente la cebolla, pasados unos minutos vamos añadiendo la zanahoria, el puerro y las judias y lo dejamos sofreir unos minutos más y a continuación el tomate rallado. Dejamos pasar un tiempo hasta que el tomate vaya cogiendo un poco de color y echaremos una cucharada de harina, la rehogamos un poco e incorporaremos los muslos de pollo, la miel (al gusto), una cucharada sopera de mermelada de tomate y las almendras picadas, daremos unas vueltas y regaremos con una copa de brandy, el cúal flambearemos (hay que tener precaución de apagar el extractor).



Por otra parte, mientras hemos estado haciendo el sofrito de las verduras habremos calentado el caldo de ave o verduras junto a una ramita de romero y una vez se ha flambeado el brandy añadimos a la cazuela el caldo junto con el resto del macerado, cubriendo un poco más de la mitad de los muslos. Dejaremos hervir durante 45 minutos a fuego lento e iremos removiendo el guiso para comprobar la consistencia de la salsa.



En cuanto al brócoli, yo os recomiendo hacerlo por separado, bien hervido o al vapor. En una cazuelita apta para microondas colocamos el brócoli junto un chorrito de agua. Pasados unos 8 o 10 minutos estará listo. Lo hago de esta manera para evitar que se nos deshaga en la cocción, ni pierda ese color verde intenso. Cuando falten unos minutos para finalizar el guiso lo incorporamos a la cazuela y listo. Comprobaremos la consistencia de la salsa y si vemos que nos ha quedado un poco líquida la espesaremos con un poco de Maizena, diluida en agua fria.



Para la guarnición he optado por unos chips de batata roja, sobre todo ahora que es la temporada y por su sabor un tanto dulzón, son muy faciles de hacer, se cortan con un pelaverduras, bien finos, y se frien en aceite bien caliente. Espero que os guste la combinación de sabores que he preparado y que os aproveche!!.

jueves, 27 de octubre de 2011

Spaghetti "Frutti di Mare" al aroma de Albahaca



La pasta es uno de los alimentos básicos de la dieta mediterránea y puede tener variedad de combinaciones. En mi cocina es un plato que no suele faltar nunca, de hecho a mi marido, Sebas, le encanta, es su plato favorito. Supongo, que en la mayoría de las casas suele ser el plato más socorrido a la hora de improvisar una receta. Combinada con carne, verdura, en ensalada y de mil formas distintas, suele ser casi siempre del agrado de la mayoría de los comensales.
Esta semana, dando una vuelta por el mercado me acerqué a la pescadería donde suelo hacer la compra, encontré unos mejillones y unas almejas que tenían un aspecto impresionante y decidí preparar esta receta, que aún no siendo algo muy novedoso, si os aseguro que el resultado de la combinación del sabor a mar junto a la pasta y ese aroma tan especial que le da la albahaca os dejará una sensación tan agradable, que no dudareis en volver a repetir.

INGREDIENTES: (2 Personas)

- 150 gramos spaghetti
- Albahaca fresca
- 300 gramos de almejas
- 100 gramos gambas peladas
- 500 gramos de mejillones
- 1 sepia pequeña
- Tomate triturado
- 1 cebolla tierna
- 1 ajo
- Vino blanco





ELABORACION:

En primer lugar pondremos a remojo las almejas en agua con sal para que vayan soltando la arena y mientras tanto, limpiaremos lo mejor posible los mejillones estirando de las barbas con cuidado y rascando la concha con un cuchillo o con un "nanas". En una cacerola, ponenos un poquito de aceite de oliva y echamos las almejas y mejillones juntos, a los que añadiremos una hoja de laurel. Dejamos que se nos abran y reservamos, eso sí una vez se hayan enfriado retiraremos algunas conchas para que nos ocupen tanto a la hora de presentar el plato, y colaremos el jugo que hemos obtenido de la cocción.

Vamos preparando el ajo, la cebolla y la albahaca, que picaremos bien finita, para que suelten bien todo su aroma. En una sartén, tipo wok pondremos un buen chorrito de aceite e incorporaremos primero el ajo e inmediatamente la cebolla, sofreimos y añadimos un poco de vino blanco dejando evaporar el alcohol. Una vez bien pochado, añadimos las gambas y la sepia, previamente troceada. Pasados 2 o 3 minutos echaremos el tomate triturado y la albahaca, y dejaremos un buen rato para que se fundan todos los aromas. Para darle más sabor a este sofrito, echaremos un poco del caldo de la cocción de las almejas y mejillones.



Con la salsa ya preparada, sólo nos queda cocer la pasta, yo he utilizado spaghetti de verduras, me gustan por su colorido, y si además aporta alguna vitamina extra, pues mejor. Cocemos el tiempo que marque el fabricante, escurrimos bien y las añadimos al sofrito, donde le damos un último golpe de calor, así conseguiremos que se impregnen de los sabores de nuestra salsa. Decoramos con unas hojas de albahaca (o de perejil) y ya tenemos listo nuestro estupendo plato de pasta marinera, el que quiera puede añadir un poco de queso parmesano, yo no lo hago, ya que por si solos tienen un sabor exquisito. Buen provecho!




jueves, 20 de octubre de 2011

Tatín de Manzana con pasta Filo.



En realidad este postre es un falso tatín. "Tarte tatín" es una variante de la tarta de manzana pero con la peculiaridad de estar al revés, manzanas debajo y la masa encima.

Existen múltiples versiones acerca de su origen, pero quizás la más aceptada se debe al despiste de una de las hermanas Tatín, Stéphanie, la cual cometió el error de cocinar más de la cuenta las manzanas que estaba preparando y decidieron para no desperdiciarlas cubrirlas con una pasta por encima y volver a hornear. Al darle la vuelta todavía en caliente consiguieron, sin imaginarselo, este fabuloso postre tan típico de la cocina francesa.

Esta receta se suele hacer con masa quebrada o con hojaldre, pero como tenía por casa un paquete de pasta filo y me dije ¿Por qué no probar un tatín diferente? Esto es lo que he preparado esta semana para darme el gustazo de saborear algo tan exquisito como éste postre.

"El espíritu de antaño en cada sabor. La cocina de hoy en cada plato". Creó que es una buena frase, un lema perfecto para este postre, y que explica mi concepción sobre la cocina en general.



INGREDIENTES: (2 Personas)

-6 Hojas pasta filo
- 2 Manzanas Golden
- Mantequilla
- Azúcar
- Canela en rama y en polvo
- Ron de caña
- Helado de vainilla con nueces macadamia
- Sirope de caramelo para decorar
- Una cucharada de Nocilla o cacao en polvo
- Una naranja

ELABORACION
:

La receta es bien sencilla, quizás lo más complicado radica en conseguir que se hagan bien las cestitas de pasta filo y que no se rompan a desmoldar.
En un vaso, calentamos en el microondas, una nuez de mantequilla junto a una cucharada de nocilla o cacao en polvo, lo removemos bien y reservamos. Extendemos una hoja de pasta filo y pincelamos con la mezcla, le rallamos por encima cáscara de naranja procurando que no caiga la parte blanca. Colocamos otra lámina de pasta y volvemos a repetir la operación. Las cortamos en cuatro e introducimos cada porción en una flanera (yo hice cuatro por si se rompía alguna), procurando no hundirlas demasiado, ésto nos ayudará a poder desmoldar mejor la masa. Si es necesario recortamos un poco los bordes.
Con el horno precalentado a 180º, las tendremos unos 15 minutos hasta que tome un color doradito.



Una vez se hayan enfriado, desmoldamos con cuidado las cestitas de pasta (ojo son relativamente frágiles) y las mantendremos en el horno para que se nos queden templadas.
Pelaremos las manzanas y cortaremos en gajos retirando el corazón. En una sartén pondremos una cantidad adecuada de mantequilla y azúcar al gusto (se puede utilizar azúcar blanca o de caña) y añadiremos las manzanas junto con un poco de ron, una rama de canela y un poco de agua. Las saltearemos durante 4 o 5 minutos hasta conseguir que queden caramelizas.
Ya tenemos lista la preparación, nos queda emplatar el postre. Introducimos las manzanas en el interior de la masa, y al lado colocamos una bola de helado de vainilla con nueces de macadamia (yo lo encuentro buenísimo) y decoramos con el sirope de caramelo, por último espolvoreamos con la canela molida y se sirve calentito.
Es una forma diferente de comer un tatín, pero el crujiente de la pasta con la manzana caliente mezclada con el helado os sorprenderá. " Bon appétit"


martes, 11 de octubre de 2011

Arroz "Regina" con Bogavante



El arroz es toda una institución aqui en Valencia, hay infinidad de propuestas para degustarlo, bien sean caldosos, como el "arros amb fesols y naps" o las típicas "calderas", melosos, mayormente de marisco o pescado, o secos, como es el popular "arroz al horno", el "arroz a banda" y por supuesto, su afamada "paella". En esta ocasión, he optado por uno de mis preferidos y que más éxito tiene a la hora de agasajar a mis invitados y es por supuesto, el "arroz con bogavante". Es un arroz meloso, sabroso, que sabe a playa, a marisco, a Mediterráneo, y os doy mi palabra que un buen arroz con bogavante en su punto, es algo sublime.

He decidido llamarlo así, (Regina) porque he conjugado diversas recetas que he ido probando y con las que finalmente he llegado a hacer una receta propia, muy mia, probando diversos condimentos y retocando ciertas formas de elaboración, dándole mi toque personal. Os lo recomiendo, probadlo y ya me contareis.



INGREDIENTES (Para 2, 3 personas):
- 1 Bogavante.
- 300 gr. de gamba mediana pelada.
- 300 gr. de Arroz Bomba.
- 1 Cebolla tierna mediana.
- 1 Tomate.
- 1 Diente de Ajo.
- Almendras fritas.
- Azafrán.
- Carne de pimiento choricero.
- Caldo de pescado
- ½ Copa de Brandy.
- Perejil picado.



ELABORACION:


Para que la elaboración del plato nos resulte más fácil, cómoda y limpia, nos aseguraremos de tener todos los ingredientes bien preparados. Para ello, picaremos la cebolla y el ajo, muy finos (para que prácticamente se nos deshagan luego en el guiso, y no se noten los trocitos), también el rallamos el tomate y lo reservamos todo, por otra parte trituramos las almendras en un mortero y les añadimos unas hebras de Azafrán, reservamos y ya podemos comenzar con la elaboración de nuestro plato.

Comenzamos cortando el bogavante, separamos la cabeza del crustáceo, cortamos las pinzas y las cascamos levemente con unas pinzas para marisco, el resto del cuerpo lo cortamos a rodajas o en dos secciones transversales, dependiendo del tamaño de éste. En una cazuela ancha pondremos a calentar aceite de oliva y pondremos a dorar el bogavante, veréis que con el calor el caparazón va tomando un color rojo intenso, y de la cabeza irá desprendiéndose parte de su jugo. En este momento podemos poner el caldo de pescado en un cazo aparte, a fuego lento, para que vaya calentándose mientras continuamos con la receta.



Una vez sofrito el bogavante, reservamos el cuerpo y las pinzas, y de la cabeza extraemos todo el coral, que unido al jugo que haya soltado, añadiremos al mortero junto a las almendras picadas. En la misma cazuela volvemos a añadir un poco de aceite, sofreímos ligeramente el ajo e inmediatamente añadimos la cebolla y lo pochamos bien todo. Llegados a este punto añadimos el tomate triturado, una pizca de sal y conjuntamente una cucharada de pulpa del pimiento choricero. Sofreímos bien, removiendo de vez en cuando y cuando el tomate comienza a tener ese color ocre tan característico de los sofritos, hacemos un hueco en el centro, añadimos el brandy, y flambeamos (tener la precaución de apagar la campana extractora y de tener una tapa a mano, por si tenéis que apagarlo), removemos bien y cuando se apague la llama añadimos las gambas peladas, dejamos unos minutos, que las gambas suelten su agua y se cuezan un poco en el tomate y añadimos el arroz, removemos de nuevo y lo sofreímos un poco, hasta que el arroz comience a transparentar.



En este momento ya tendremos el caldo bien caliente y podemos añadírselo al arroz, de esta manera no cortamos su cocción, dejamos que se cocine unos cinco minutos y añadimos el contenido del mortero, al que le habremos añadido una cucharada de caldo, para conseguir una pasta llena de sabor. Transcurridos unos otros diez minutos más, añadimos el bogavante y dejamos cocer otros tres o cuatro minutos, durante este tiempo podremos ir añadiendo caldo bien caliente, según queramos que el resultado sea más o menos caldoso. Apagamos el fuego y espolvoreamos con perejil picado, dejamos reposar y listo para servir!

Os aseguro que es muy sencillo de elaborar y el resultado es sorprendente y muy sabroso. Un lujo de plato con el que quedareis siempre muy bien con vuestros invitados. Espero que lo disfrutéis!